La propuesta pretende realizar un proceso de apropiación en las paredes encontradas dentro del espacio cotidiano, estas que han sido testigos de la existencia que como en este caso los hidrantes, fueron parte del mobiliario urbano de una ciudad que contenía objetos para el bienestar dentro de la cotidianidad urbana.
La imagen, el hidrante es el elemento que se pretende utilizar como forma, mediante pintura intervenir sobre varias paredes de las esquinas del recorrido de la carrera 10 tomando como eje central la parte occidente de la plaza de Bolívar de la ciudad. La propuesta tiene la intensión de intervenir entre diez y quince espacios con el objeto pintado sobre las superficies, la imagen a escala 1-1 intentado dar la impresión lo mas fiel posible a la apariencia real.
Tanto la acción de pintar como la pintura final dentro del espacio pretende ser una posibilidad de interacción con los transeúntes intercambiando opiniones y permitiendo que se hable de la ciudad y sus transformaciones.
SUSTENTACION:
Recuerdo que cuando niño al recorrer la ciudad me llamaba la atención esas formas metálicas que salían del piso con sus coloridos rojizos que llamaban la atención entre el paisaje grisáceo que se percibía en ese Tunja de los años setenta. Esos objetos raros que funcionaron como columpios y juguetes en las esquinas los empecé a extrañar cada vez que arreglaban los andenes y quedaban poco a poco enterrados en el piso y yo seguía creciendo creando una gran distancia entre ellos; ahora entiendo como funciona la modernidad en mi ciudad, fuera escudo viejo del edificio de la alcaldía, fuera casas viejas para dar cabida a los cajones de bocadillos arquitectónicos, y los hidrantes: sale mas barato dejarlos enterrados que rescatarlos. Los objetos también tienen historia.
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